Año 1.775.
En el dos de septiembre, muy brioso,
salió un toro de prueba, todo horrores;
y apenas vio a un torero, muy fogoso,
le mostraba escarbando sus furores.
Oblígale bizarro, y valeroso,
a que esgrima su cólera y rigores;
y al irle a dar un golpe muy severo,
no se encontró otra cosa que el acero.
Salió el segundo bruto presuroso,
con tal intrepidez, y furia tanta,
que pareció temblaba todo el coso,
y que su puerta altiva la quebranta.
A todos acomete muy rabioso,
y con fuertes rugidos amedranta;
pero vino a pagar su orgullo fiero
a la valiente espada de un Romero.
A los cuatro restantes compañeros
( que furiosos mostraron su fiereza
en seguir muy briosos los toreros,
con arrogante ardor y ligereza )
se esmeraron valientes los Romeros
en quitarles las vidas con presteza,
pues lograba su brazo en la estocada
al rendir a sus pies la fiera airada.
Fue tan grande el concurso en este día,
al ver toros de Cuenca en Talavera,
que gente de la Plaza se salía
por no encontrar asiento ni barrera,
por las calles más anchas no cabía,
pues fue la confusión de tal manera,
que en gruesos encontrados pelotones
formaban avanzados escuadrones.
( Versos de Miguel Matías de la Llave.
Año 1.775. )
Foto de ..... TITO.
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